¿Recuerdas tu muñeca favorita?
¿El rato tan divertido que pasabas con ella?
¿Las risas y los secretos que le contabas?
¿La ropa que le hacía tu abuela y las historias que te inventabas?
Así nacieron los peluches,
pensando en los juegos de mi infancia,
en los muñecos achuchables y blanditos.
Todos llevan un corazón,
porque los peluches cobran vida,
cuando tu peque juega con ellos,
y se inventa aventuras:
donde surcan el mar azul,
y visitan juntos planetas lejanos.
Le dará la manita cuando salgan a la calle,
y dormirán abrazados.
Vuelve a jugar como antes,
inventaros aventuras,
que la risa y los juegos llenen vuestro hogar.
Puedes ver los muñecos en la tienda online aquí.
Recuerda que los peluches tejidos a ganchillo de momento no van a volver así que solo quedan los que están en stock en la web.
No hay nada más achuchable que un bebé,
con esa piel suavecita,
y ese olor que embelesa.
Y a medida que crecen,
nos enseñan a ver el mundo a través de sus ojos,
y no te cabe el amor el corazón,
porque puedes ver en sus ojos el amor que sienten por ti,
y te enredan con su risa y sus juegos,
y se inventan personajes,
y a ti te toca hacer de buscadora de tesoros,
o de piloto de avión,
y vuelves a ser niña otra vez,
y aprendes a cuidarla, escucharla, y lo más importante…
a quererla y comprenderla.
Y en una tarde de juegos, risas y abrazos nacieron los peluches, porque la peque me pidió que le tejiera un muñeco achuchable y blandito, lleno de color, que fuera como coco, el de sus dibus favoritos… pero mami, yo elijo los colores - me dijo.
Así que la maternidad me trajo hasta aquí.
Y fuimos inventando personajes,
y mezclando colores,
los rellenamos con nubes de algodón,
que pescamos con una red desde el tejado.
Tejidos con mil pirivueltas de ganchillo y algodón suavecito.
Son amorosos y achuchables.
Cada uno tiene una historia diferente, es único, no hay dos iguales ¿lo sabías?.
Igual que nosotros, porque todos tenemos algo que nos hace especiales.
Y todos llevan un corazón, como tú y yo, porque se ponen tristes si estás triste, y te dan un abrazo para que te sientas mejor, porque los abrazos llevan magia, ese es el secreto de los peluches,
ahhh, que no te lo crees ¿eh?
Dime qué sientes cuando tu peque te da un abrazo, de esos de apretar, de los que te da con los ojos cerrados.
Por eso los peluches son abrazables, para dormir con tu peque y reconfortarle por la noche.
Y jugar por el día,
a inventarse aventuras,
igual que cuando tú eras pequeña y jugabas con tu muñeca favorita,
¿te acuerdas?
Vuelve a jugar como antes,
inventaros aventuras,
que la risa y los juegos llenen vuestros corazones.