En noviembre los romanos celebraban los llamados Juegos Plebeyos del día 4 al día 17. Incluían representaciones teatrales y deportivas.
Por eso he dedicado este mes a Minerva, la diosa de la sabiduría, las artes, patrona de los artesanos y protectora de Roma.
Nació de la cabeza de La Prudencia, cuando Vulcano le abrió la cabeza de un hachazo porque tenía un fuerte dolor.
Minerva fue la encargada de poner el nombre a la ciudad griega de Atenas. Hubo una competición entre ella y Neptuno para ver quién de los dos hacía el regalo más útil a la ciudad. Minerva hizo crecer un olivar y Neptuno creó el caballo. Doce dioses griegos dieron la victoria a Minerva.
Se la conocía como la diosa de las mil obras. Sus fiestas se celebraban del 19 al 23 de marzo y estaban dedicadas a los artesanos y también el 13 de junio. Los gremios de poetas y actores se reunían para hacerle ofrendas en su templo en el monte Aventino en Roma.
He dibujado en noviembre:
En el pueblo hace muchos años había ovejas, y el pastor las sacaba todos los días a pastar.
Recuerdo esperarlas llegar a la cuadra cuando volvía el pastor, el sonido de los cencerros y la alegría de ver que traía un nuevo cordero, y si ya nos lo dejaba acariciar, la alegría era infinita.
La rueca la usaba mi abuela para hilar la lana de las ovejas
La rueca sigue ahí para recordarme que las cosas hechas a mano tienen mucho valor, sobre todo por el amor con el que están hechas.
Marta
Fuente de la información: Wikipedia